Qué es el desarrollo sostenible
La definición más citada de desarrollo sostenible pertenece al informe «Nuestro Futuro Común» de las Naciones Unidas, presentado en 1987: «El desarrollo sostenible es el desarrollo que satisface las necesidades del presente sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras de satisfacer las suyas propias». Hay tres dimensiones de desarrollo sostenible (económico, medioambiental y social) y existe un vínculo inextricable entre ellas. El desarrollo sostenible está especialmente ligado a la Agenda 2030, que fue aprobada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en septiembre de 2015, y dio lugar a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS): 17 objetivos y 169 metas asociadas para afrontar los desafíos más apremiantes del mundo.
Por qué es el desarrollo sostenible pertinente para las empresas
Las empresas desempeñan un papel fundamental en la consecución de los ODS. Estas emplean a nueve de cada diez personas en el mundo y ofrecen oportunidades, formación y carreras profesionales, contribuyendo así a la erradicación de la pobreza. El sector privado impulsa el crecimiento económico y provee los bienes y servicios necesarios en nuestro día a día. Además, hace uso de la creatividad y la innovación para ayudar a resolver desafíos mundiales de desarrollo sostenible. Sin embargo, las políticas y normativas no siempre son propicias para promover la Agenda 2030, ya que pueden crear nuevas y considerables cargas burocráticas para el sector privado. Cada vez más, las empresas afrontan una mayor variedad de legislaciones, normas y marcos que no siempre son complementarios y útiles.
Cuál es la postura de la OIE sobre el desarrollo sostenible
En la Declaración de Bahrein, la comunidad mundial de empleadores reafirmó su pleno apoyo a los ODS y su compromiso para contribuir a la consecución de dichos objetivos. Las alianzas son fundamentales para alcanzar los ODS. Las empresas, los gobiernos y la sociedad civil no pueden seguir trabajando de forma aislada en este sentido. Es de suma importancia contar con unas condiciones marco propicias para aprovechar el potencial de estas alianzas. Los gobiernos necesitan crear entornos propicios para que las empresas generen empleos, impulsen el crecimiento y el desarrollo económicos, así como establecer los marcos de colaboración adecuados para que las empresas, los gobiernos y la sociedad civil trabajen juntos de forma productiva. Además, es importante mostrar la labor de las empresas en la aplicación de los ODS, en particular el Objetivo 8 sobre crecimiento económico y empleo productivo, y destacar los desafíos a los que se enfrentan las empresas. Con ello se pretende supervisar la agenda de sostenibilidad y reforzar un entorno propicio para las empresas sostenibles.
Cómo influye la labor de la OIE en materia de desarrollo sostenible para la promoción de la agenda empresarial
Los ODS son una prioridad para la OIE. En este sentido, la OIE cuenta con el Grupo de trabajo de políticas sobre desarrollo sostenible, destinado a facilitar el intercambio de experiencias, establecer alianzas y crear capacidades. La OIE es, además, socio del portal Business for 30, que pretende promover la participación de las empresas en la Agenda 2030. La OIE se centra, en particular, en la repercusión de las políticas y medidas de desarrollo sostenible sobre empleo y condiciones sociales, y ayuda a velar por que los responsables de la elaboración de políticas escuchen, comprendan y tengan en cuenta la perspectiva empresarial. La OIE lleva a cabo una labor de concienciación para garantizar que sus miembros entienden de forma plena estos ambiciosos objetivos y participan de manera más eficaz en su consecución. La OIE ayuda a analizar las implicaciones para las empresas, defiende con eficacia a los empleadores en los foros internacionales y, sobre todo, vela por que las organizaciones de empleadores formen parte del mecanismo de rendición de cuentas.
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