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16 de febrero de 2017
Preocupación de la OIE ante el acoso y la vulneración de derechos de ANEP y sus dirigentes por parte del Gobierno de El Salvador
La Organización Internacional de Empleadores (OIE) expresa su preocupación ante el acoso, la persecución política y la vulneración de derechos de libre asociación y de consulta tripartita de los cuales es objeto la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP), organización de empleadores más representativa en El Salvador.
La ANEP representa más de 15 mil empresas de las cuales el 93% son pequeñas, es miembro de la Organización Internacional de Empleadores y representante del sector privado salvadoreño ante la Organización Internacional del Trabajo.
Lamentamos que por razones ajenas a la buena voluntad de la ANEP hay un retroceso en el diálogo tripartito entre trabajadores, gobierno y empleadores. En efecto, el Gobierno de El Salvador continúa incumpliendo convenios de la OIT voluntariamente ratificados como el Convenio 131 (fijación de salarios mínimos) al imponer el día viernes 16 de diciembre de 2016, un salario mínimo sin sustento técnico, ni consulta con la representación empresarial más representativa.
A esto hay que agregar la indebida injerencia en la designación el día 5 de diciembre de 2016 de representantes de empleadores y empleados en instancias tripartitas como el Consejo Nacional del Salario Mínimo. Esta injerencia del Gobierno de El Salvador le proporciona un amplio control del Consejo Nacional del Salario Mínimo, violando así la institucionalidad, la seguridad jurídica y las disposiciones de los Convenios de OIT No. 87 (libertad sindical), 131 (fijación de salario mínimo) y 144 (consulta tripartita).
Preocupa profundamente también que la ANEP sea víctima de espionaje y de violentas protestas frente a su sede (ver anexo- aviso presentado por la ANEP ante la Fiscalía General de la República y comunicados de prensa emitidos por la ANEP). De hecho, desde mayo de 2016, la sede de la ANEP ha sido atacada en 16 ocasiones por grupos de choque (ver anexo- enlaces de noticia y demanda ante la Procuraduría para la Defensa de Derechos Humanos). Durante estas acciones callejeras, su personal ha sido víctima de insultos y mensajes calumniosos, poniendo en riesgo no solo su seguridad, vulnerando sus derechos de libre circulación y de seguridad, sino también la existencia misma de la organización de empleadores.
A ello se suma una campaña de difamación contra el sector empresarial y los líderes gremiales, que vulneran los derechos de los empleadores salvadoreños (ver anexo- notas de difamación). En efecto, los activistas han difamado a los líderes gremiales refiriéndose a ellos como ladrones y evasores sin ningún sustento legal. Preocupa no sólo la pasividad sino la probable complicidad de instituciones públicas en estos hechos.
Los hechos arriba mencionados demuestran que no existe interés en establecer un diálogo social sobre la base del respeto hacia las organizaciones empresariales libres e independientes y del cumplimiento de los Convenios de la OIT voluntariamente ratificados. La OIE insta al Gobierno de El Salvador, con el interés de defender la institucionalidad y la seguridad jurídica del país, a que respete sin demora los Convenios 87, 131 y 144 de la OIT, actúe para un cese efectivo y urgente de las agresiones y acepte sin demora la visita de la misión de contactos directos propuesta por la Comisión de Aplicación de Normas de la Conferencia Internacional del Trabajo en junio de 2016.
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